Ángel Leyva subraya que, ante las propuestas en materia educativa, se requieren rutas plausibles y claridad para saber de dónde se obtendrán los recursos que garanticen el derecho a aprender de niñas, niños y jóvenes
Los tiempos electorales no solo son momentos cruciales para definir el rumbo político de un país, sino también para resaltar y abordar temas fundamentales para el desarrollo de la sociedad. Uno de esos temas es la educación de niñas, niños y jóvenes, que emerge como un eje estratégico que demanda atención prioritaria, tanto en el presente como en el futuro de las próximas generaciones.
Ángel Leyva Murguía, director de Investigación de Mexicanos Primero Sinaloa, subrayó que, a pesar de su relevancia, es evidente que la educación enfrenta una serie de desafíos que requieren acciones urgentes y coordinadas.
Un análisis realizado por Mexicanos Primero sobre cerca de 240 propuestas impulsadas por diversas organizaciones nacionales e internacionales revela puntos de coincidencia, así como áreas que no han sido debidamente atendidas, representando oportunidades de mejora y preocupaciones que exigen una mayor atención, especialmente ante los cambios de administración a nivel federal y local.
“Uno de los consensos más notables es el reconocimiento de que la pandemia hizo más evidentes las brechas de desigualdad y de aprendizaje que enfrentaron los estudiantes, así como las evidentes afectaciones socioemocionales”, expuso
En Sinaloa, por ejemplo, se evidencia en los bajos resultados de las evaluaciones diagnósticas de la Mejoredu, donde ningún grado (excepto segundo año) logró superar el 60% de respuestas correctas, siendo los estudiantes de cuarto y quinto año de primaria los más afectados, quienes ingresaron a la escuela durante la pandemia, comentó.
Leyva Murguía indicó que temas como la prevención de la violencia, la recuperación de las escuelas de tiempo completo, la mejora de la infraestructura educativa, las condiciones laborales del magisterio y los incentivos salariales son ejes relevantes que requieren atención prioritaria.
Agregó que la transparencia y rendición de cuentas en el uso de los recursos, es esencial para garantizar una efectiva gestión y condiciones óptimas para los alumnos, pero el análisis de MPS encontró que estos aspectos han sido relegados en la conversación pública.
“Tampoco se habla del mejoramiento de la formación docente, ya que las escuelas normales han sido excluidas de la conversación a pesar de que es ahí donde se forma a los futuros maestros. Aunado a esto, tampoco hay propuestas que consideren a los directores y Asesores Técnicos Pedagógicos (ATP), como actores relevantes para el acompañamiento y asesoría en las escuelas”, lamentó.
El director de Investigación de MPS insistió en la necesidad de establecer un camino de priorización que permita implementar acciones concretas y efectivas en las comunidades escolares, con una mayor claridad sobre la obtención y uso de recursos para garantizar el derecho a aprender de niñas, niños y jóvenes.
Es imperativo, dijo, que la educación se mantenga como una prioridad en el debate electoral, por lo que es hora de trabajar juntos para impulsar una agenda educativa robusta, identificando áreas de mejora y generando consensos que conduzcan a soluciones más efectivas.