Opinión
La calidad de la relación entre quienes detentan el poder de gobierno en sus distintos niveles y los organismos legítimamente surgidos desde la sociedad civil, es un indicador de la salud de una democracia. En tiempos particularmente complejos, vemos cómo la colaboración entre fuerzas diversas y plurales cede terreno frente a la polarización y el enfrentamiento. ¿Qué justificación daremos a la generación joven cuando se nos cobre la cuenta por preferir la división sobre la búsqueda de soluciones a problemas fundamentales para la supervivencia humana?
Mientras el siglo 21 nos sorprende a cada vuelta de calendario, aprendemos que no hay problema trascendental que se pueda resolver sin altas dosis de diálogos, negociación y acción colectiva. Por lo mismo, cuando frente a un tema las voluntades manifiestan un acuerdo unánime, se está frente a una oportunidad extraña. Una rara avis cívica que llama a los actores que habitan el espacio público a dar un paso adelante y asumir responsabilidad. Tal como está ocurriendo con la agenda de primera infancia en la que gradualmente comienza a florecer un vergel de trabajo y colaboración por niñas y niños en Sinaloa.
Bajo el compromiso adquirido por el gobernador Rocha Moya con los propósitos, metas y objetivos del Pacto por la Primera Infancia, esta agenda se ha desplegado con vigor a través de la Estrategia Nacional de Atención a la Primera Infancia (ENAPI). Promulgada a principios del 2020 y piloteada en Sinaloa durante el 2021 bajo la tutela de Mexicanos Primero Sinaloa, la ENAPI ha logrado sobrevivir cambios de gobierno para comenzar a convertirse en ejemplo de lo que debiera ser una política de estado. Para niñas y niños, siempre más, nunca menos. El aforismo no es en vano.
Desde la creación del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) en el año 2015, México ha dado pasos importantes en esta materia. A pesar de los retos en materia de atención a esta población, sobre todo en el sector educativo, la existencia de un sistema de gobernanza para coordinar la colaboración entre dependencias de gobierno en múltiples niveles es sin duda alguna una fortaleza.
Tal como fue aprobado durante la tercera sesión ordinaria del Sistema Estatal de Protección Integral de los derechos de Niñas, Niños y Adolescente del pasado jueves 9 de febrero, en Sinaloa esta labor será llevada a cabo con el acompañamiento de 20 representantes de la sociedad civil, quienes formarán parte del Consejo Consultivo de este mecanismo. Gracias a la honrosa invitación extendida por la secretaria ejecutiva del SIPINNA Sinaloa, Nuria González Elizalde, Mexicanos Primero Sinaloa será parte de esta importante tarea.
Desde este espacio único para el diálogo y la escucha activa, Mexicanos Primero Sinaloa continuará su defensa profesional del derecho a aprender a través del uso de evidencia y de la propuesta de caminos alternativos. La realidad que hoy viven niñas, niños y jóvenes en el estado está lejos de ser perfecta. No hay mejor aliciente para comenzar a transformar esta realidad desde hoy mismo.