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Opinión

La violencia y el acoso escolar: un tema urgente por atender
23/enero/2025
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Angel Leyva
Ángel Leyva
Director de Investigación en Mexicanos Primero Sinaloa

Desde hace cinco meses, Sinaloa enfrenta una grave crisis de violencia que afecta a niñas, niños y jóvenes en la entidad y mantiene a algunas comunidades escolares en el miedo y la incertidumbre. Sumado a lo anterior, la posibilidad de ser agredido no sólo se manifiesta en las calles, los casos recientes de violencia escolar que vivieron algunos estudiantes de secundaria en Los Mochis y Guasave son un claro ejemplo de que este es un tema que requiere ser atendido urgentemente, ya que impide que las escuelas sean espacios seguros y propicios para aprender.

La violencia escolar es un fenómeno complejo que ocurre en diversos contextos y adopta múltiples formas. De acuerdo con la UNESCO (2024), incluye actos y amenazas que generan daño físico, emocional, psicológico, sexual o de otra índole, los cuales pueden ser ocasionados por compañeros, personal escolar o incluso personas externas a la escuela.

El acoso escolar es una forma en la que se manifiesta la violencia y consiste en el hostigamiento, intimidación o abuso persistente hacia una víctima. En otro estudio de la UNESCO (2018) en el que se consideran datos de 144 países, se identificó que entre las principales razones de acoso se encuentran: la apariencia física; la raza; nacionalidad o el color; la religión; desventaja socioeconómica; inmigración; y estudiantes que no se ajustan a las normas de género.

Entre las consecuencias de vivir el acoso escolar está el debilitamiento de su sentido de pertenencia a la escuela, los hace más propensos a faltar o incluso abandonar sus estudios, y afecta en gran medida su rendimiento académico. No solo las víctimas directas se ven afectadas, el acoso genera un ambiente hostil que afecta a los compañeros y al personal escolar. En términos de salud mental, las víctimas enfrentan problemas como ansiedad, depresión, baja autoestima y en casos extremos tendencias suicidas, además de sentirse más solitarios y menos satisfechos con sus vidas. A esto se suman comportamientos de riesgo, como el consumo de drogas y alcohol o experiencias sexuales tempranas, que agravan las consecuencias a largo plazo.

En Sinaloa existen distintos marcos normativos que permiten identificar, atender y enfrentar estos tipos de violencia. Entre estas se encuentra la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; La Ley para Prevenir, Atender y Erradicar la Violencia Escolar y la Ley de los Derechos de las Niñas Niños y Adolescentes. Asimismo, en agosto de 2024 se publicó el Protocolo de Erradicación del Acoso Escolar en Educación Básica del Estado de Sinaloa.

Sin embargo, desde Mexicanos Primero Sinaloa hemos sido muy insistentes al respecto: cambiar la realidad va más allá de leyes y reglamentos. De acuerdo con la Red por los Derechos de la Infancia en México, la cual utiliza datos INEGI y la Encuesta Nacional sobre Discriminación: de la población de 12 a 17 años en México, 28 por ciento han sufrido acoso escolar; 56 por ciento han recibido burlas o les han puesto apodos que no les gustan u ofenden; 83 por ciento los han obligado a hacer algo que no quieren; 29 por ciento los han empujado, golpeado u amenazado; 84 por ciento les han enviado comentarios, fotografías o videos ofensivos.

Esta realidad exige que el tema del acoso escolar sea considerado un tema relevante que debe ser atendido. Por lo tanto, se requiere un enfoque integral que trascienda los marcos normativos y se enfoque en construir entornos escolares cada vez más seguros. Además, será fundamental fortalecer la formación docente. Los maestros y directivos requieren herramientas, conocimientos y habilidades que les permitan identificar, prevenir y resolver estas situaciones de manera efectiva, asegurando una intervención adecuada y oportuna.

Este desafío demanda estrategias que incluyan la sensibilización de toda la comunidad educativa, el diseño de programas que fomenten habilidades socioemocionales y el establecimiento de normas claras de convivencia. Solo mediante el compromiso de todas y todos será posible transformar las escuelas en espacios donde cada estudiante pueda desarrollarse plenamente, libres de violencia y discriminación.

Fuente: https://www.noroeste.com.mx/colaboraciones/la-violencia-y-el-acoso-escolar-un-tema-urgente-por-atender-BB10334270

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