La Secretaría de Educación Pública (SEP) anunció recientemente la puesta en marcha del programa “La Escuela te extraña”, una estrategia en el nivel medio superior que busca recuperar a los estudiantes que abandonaron las aulas.
El plan, presentado por el titular de la SEP, Mario Delgado Carrillo, propone que docentes y directivos sean quienes acudan a convencer a los jóvenes de regresar a clases. La medida, que busca disminuir las cifras de abandono escolar, ha generado un intenso debate dentro del magisterio y entre especialistas en educación.
La reacción del magisterio
La reacción del magisterio no tardó en hacerse visible. En redes sociales, docentes de todo el país expresaron su inconformidad, señalando que la propuesta suma una nueva carga a sus ya múltiples responsabilidades.
El psicólogo y creador de contenido educativo Jorge Marentes, conocido en redes como “Profe Mondragón”, fue una de las voces críticas.
“Creo que si permitimos esto, porque ahorita dice que es en media superior, al rato va a ser en educación básica. Ya tenemos la responsabilidad de que si el niño tiene tres inasistencias, tenemos que llamar a sus papás (para preguntar) por qué no está yendo el niño, en lugar de que los papás sean los que nos reporten y nos digan por qué su hijo no va a clases”, expresó en un video que subió a sus redes.
Los comentarios de interacción que generó el “Profe Mondragón” coincidieron en el malestar por lo que consideran una sobrecarga laboral y una falta de claridad en las funciones docentes.
“Existen responsabilidades y obligaciones. La educación es un derecho, pero es obligación de los padres llevarlos”, señaló Lizbeth Águila.
Una aparente maestra expuso que, con esta nueva responsabilidad, o se pone a dar clases o se dedica a buscar a quienes no llegan a la escuela.
Mientras que Maryana Osuna Noriega expuso que no le pagan lo suficiente como para ir de casa en casa tratando de convencer a los estudiantes a asistir a clases.
Además, señalaron que esta medida ignora tanto sus condiciones laborales como los riesgos que implicaría realizar visitas domiciliarias fuera de su jornada o de su espacio de trabajo.
La escuela no puede sola
Desde una perspectiva institucional, la directora general de Mexicanos Primero Sinaloa, Nuria González Elizalde, expuso que la preocupación del magisterio es legítima.
“Otra vez se les pide hacer lo imposible: enseñar, cuidar, contener y ahora también rastrear. Y lo hacen, con compromiso y corazón. Sin embargo, la escuela no puede seguir siendo el último eslabón de una cadena institucional que no termina de funcionar”, escribió en una columna publicada por El Heraldo de México en el que aborda este tema.
Reconoció que la intención del programa es positiva, al plantear que ningún estudiante ausente pase desapercibido, pero advirtió que la recuperación del vínculo educativo no puede depender únicamente de los maestros, sino del trabajo articulado de todo el sistema.
El caso Sinaloa: una alternativa coordinada
Como ejemplo de una respuesta más integral, González Elizalde destacó el caso de Sinaloa, donde la Secretaría de Educación Pública y Cultura (SEPyC), el SIPINNA Estatal y la Procuraduría de Protección han implementado desde 2021 un mecanismo interinstitucional para detectar y atender casos de inasistencia o abandono escolar.
Explicó que gracias a la homologación de la Ley de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes del Estado con la ley federal, las instituciones responsables de la protección y educación infantil trabajan de manera conjunta para localizar y reincorporar a estudiantes, sin delegar esta labor exclusivamente a los docentes.
“Esa experiencia muestra que el problema se puede enfrentar de manera articulada, sin sobrecargar al magisterio y activando a las instituciones responsables de garantizar el derecho a la educación”, afirmó.
La directora general de Mexicanos Primero Sinaloa hizo énfasis en que no basta con que la escuela extrañe a los estudiantes, sino que el sistema entero tiene que salir a buscarlos para reinsertarlos en su proceso educativo.
