La responsabilidad de garantizar la progresividad del derecho a aprender está en manos del Gobierno del Estado y del Congreso local, por medio del Presupuesto para la Educación 2022.
Con base en la evidencia de los diversos estudios que hemos realizado desde el año anterior y que son públicos, en Mexicanos Primero Sinaloa llamamos a darle prioridad a esta necesidad que exige un gasto que se amplíe, o al menos, no se reduzca ante las necesidades agravadas por esta coyuntura.
Mexicanos Primero, con sede en Ciudad de México, ha advertido ya que la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2022 en materia educativa no es acorde a los retos que hoy enfrenta el sistema educativo.
El nuevo presupuesto federal está mal encausado, pues los incrementos se harán para becas, pero no en la recuperación de programas destinados al apoyo para que las escuelas combatan el rezago educativo, principalmente, en las zonas más vulnerables del país.
Por eso, hoy está en la jurisdicción local la decisión de fortalecer presupuestalmente la atención a necesidades para el aprendizaje, derivadas del prologando cierre escolar obligado por la pandemia de la Covid-19.
Niñas y niños en marginación, los más afectados por recorte federal
El año pasado, en Mexicanos Primero Sinaloa alertamos sobre los impactos negativos que podrían tener los recortes y la desaparición de programas sustantivos para la población vulnerable del presupuesto.
Tuvimos la oportunidad de incidir para la reasignación presupuestal en materia educativa local, logrando revertir algunas tendencias negativas como la desaparición del Programa para la Inclusión y Equidad Educativa.
Este año, ante la nueva reducción y la incorrecta reasignación de recursos en el Presupuesto de Egresos federal en materia educativa se confirma que las niñas, niños y jóvenes que enfrentan mayores carencias y marginación serán quienes más sentirán las consecuencias generadas por una disminución en el financiamiento disponible para el año 2022.
En días pasados se anunció financiamiento local para el programa La Escuela es Nuestra con lo que el Gobierno de Sinaloa pretende acelerar el regreso a las clases presenciales. Pero se debe recordar que dicho programa además tiene que responder al fallo de la justicia federal que lo obliga a asegurar la continuidad de los objetivos del programa Escuelas de Tiempo Completo.
Por lo tanto, aunque la asignación de presupuesto local ciertamente es un anuncio positivo, sigue siendo insuficiente para atender a las múltiples necesidades del sistema educativo estatal. Sin recursos para acciones efectivas de política educativa y presupuesto para resolver los grandes problemas de aprendizaje que el cierre de escuelas empeoró, lastimará para el resto de las vidas a esta generación de niñas, niños y adolescentes.
¿Cuál debe ser el sentido del presupuesto educativo?
El presupuesto educativo para Sinaloa debe considerar y compensar lo siguiente:
-Los devastadores efectos de un cierre de prolongado de las escuelas.
-Atender el rezago educativo que ha dejado la pandemia, principalmente en escuelas con graves necesidades.
-Fortalecer los programas de atención a poblaciones indígenas, de niñas y niños con discapacidad.
-Proyectos de recuperación de aprendizajes.
-Inversiones destinadas a la conectividad para educación.
El estudio Equidad y regreso de Mexicanos Primero demuestra que el programa Aprende en Casa fue excluyente para las y los niños con discapacidad, hablantes de lenguas indígenas y que viven en zonas de alta marginación, lo que ocasionó que el rezago en el aprendizaje fuera más profundo para estos grupos, por lo que el presupuesto educativo debe ser incluyente.
Hoy existe la necesidad de unirnos en torno a un presupuesto estatal que permita mitigar el daño infligido a niñas, niños y jóvenes en Sinaloa por el recién aprobado presupuesto federal.
Las políticas para fortalecer la enseñanza y reimaginar el aprendizaje dependen de que se les asigne presupuesto. La responsabilidad está en manos del Gobierno de Sinaloa y del Congreso local.