Desde que participó en el Premio AEI 2023, la asesora técnica pedagógica sintió un refresh que encendió de nuevo la llama de la pasión por su profesión.
Las expectativas que tenía la maestra Patricia Ortiz sobre el curso de formación en Yucatán al que fue invitada por Mexicanos Primero Sinaloa no eran muy elevadas, pero tras vivir la experiencia junto a compañeros de Sinaloa y de otros estados de la República, siente que la labor de los docentes está siendo revalorizada.
Con casi 28 años en el sistema educativo, la maestra es asesora técnica pedagógica adscrita a la supervisión escolar en la Zona 016 de Educación Especial. En el Premio AEI 2023 fue ganadora en la categoría de directivos con la práctica “Yo trabajo mis emociones”, que desarrolló en una primaria en el municipio de Badiraguato.
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Como incentivo por ese galardón, Ortiz y tres compañeras y compañeros más de Sinaloa asistieron a un curso de formación en el estado de Yucatán, el cual fue organizado por la red Mexicanos Primero y en el que también participaron los ganadores del Premio ABC.
El curso se llevó a cabo del 23 al 29 de julio en la hacienda Itzincab, Yucatán, y fue organizada por La Vaca Independiente a través del Instituto de Mediación Pedagógica, los cuales implementan la metodología DIA (Desarrollo de la Inteligencia a través del Arte).
Un espacio propicio para la reflexión
La formación que recibieron fue muy completa y el espacio donde se realizó fue muy propicio para la reflexión interna, para observar, convivir y dialogar no solo de temas profesionales, sino experiencias personales, comentó.
“Para mí fue una experiencia que no pensé que fuera tan plena, en el sentido que abordaron transformación a la práctica con situaciones muy innovadoras que yo apenas estaba escuchando, pero también a lo personal, en el sentido que tocaron temas de relevancia emocional”, dijo.
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La asesora técnica pedagógica subrayó que fue muy motivante y enriquecedor que los participantes, tanto del ABC como del AEI se abrieran a la experiencia de conocerse, coincidir, expresarse como son y compartir prácticas y metodologías educativas que en otros estados y en otras funciones de la docencia se han realizado y han dado resultados positivos.
“Para mí fue una experiencia muy enriquecedora, tanto en la parte formativa, pero más en la emocional, abrió nuevos comienzos en mí, en proyectos de trabajo, pero también redes de apoyo y nuevos amigos”, dijo.
Redes de apoyo
La maestra Paty Ortiz resaltó que el compartir y dialogar con maestros y directivos de otros estados y diferentes modalidades propició la formación de redes de apoyo y de trabajo que serán de mucho beneficio para las comunidades escolares.
“Para mí, es como volver a trabajar en los procesos personales para poder brindarles a mis compañeras directivas esa apertura hacia nuevos temas, mirar hacia adentro de su trabajo personal, porque antes de ser directivas, es mirarte tú como persona, cómo estás, qué estás haciendo, qué te falta, y partiendo de ahí, fortalecerlo con lo que ellos necesitan, si es en la parte técnica o si es en la parte personal, acompañarlas”, manifestó.
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Expresó que sería muy importante que los organismos que están inmiscuidos en el sector educativo organicen y fomenten cursos de formación en los que no solo se aborde la parte teórica, sino que sean espacios para fortalecer las habilidades socioemocionales que permitan realmente transformar las prácticas de todas las figuras educativas.
“(Este curso) fue una revalorización a la figura educativa, es como voltear y decirte, ‘sí importamos a la sociedad’”, subrayó.
Viendo hacia atrás, la maestra Paty dijo que se hubiera arrepentido de no haber participado en el Premio AEI 2023, ya que marcó para ella un nuevo comienzo personal y un refresh profesional que volvió a encender la llama de la pasión por su profesión.
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“A veces el contexto, ciertas situaciones del sistema educativo, te cansan. Voltear y ver a otros compañeros haciendo lo mismo e innovando y creando cosas nuevas, dije yo, ‘hay que meterle otra vez, porque esto no se acaba hasta que ya yo firmé mi hoja de jubilación’”, indicó.
Tras vivir esta experiencia, Ortiz aseguró que se siente muy motivada para seguir aportando desde su espacio por una educación de mayor calidad en Sinaloa y México.